Me perdono a mi mismo por permitir y aceptar la tendinitis como algo malo, entrando en polaridades.
Me perdono a mi mismo por permitir y aceptar miedo a la tendinitis.
Me perdono a mi mismo por permitir y aceptar el miedo a fracasar como músico a causa de alguna enfermedad en mis manos o cuerpo en general.
Me perdono a mi mismo por permitir y aceptar el abuso hacia mi cuerpo físico, ya que no usé el perdón para prevenir abusos, y no me enfoqué en la igualdad y honestidad conmigo mismo.
Me perdono a mi mismo por permitir y aceptar la culpa por tener tendinitis.
Me perdono a mi mismo por permitir y aceptar la culpa por abusar de mi cuerpo físico.
Me perdono a mi mismo por permitir y aceptar el sufrimiento mental, el lamento y la depresión por tener tendinitis, cuando en realidad no soy yo el que sufro, sino mi mente y mis sistemas.
Me perdono a mi mismo por permitir y aceptar el hecho de alimentar la depresión, el pesar y sufrimiento mental a través de pensamientos en deshonestidad conmigo mismo.
Me perdono a mi mismo por permitir y aceptar la culpa por entrar en depresión a raíz de la tendinitis.
Me perdono a mi mismo por permitir y aceptar la frustración por tener tendinitis, cuando en realidad quien se frustra son mis sistemas, no yo mismo.
Me perdono a mi mismo por permitir y aceptar la música como algo que sobrepasa mi vida misma, dándole más prioridad a la música que a mi vida en lo físico, lo que llevó a querer mejorarme no porque es mi cuerpo, sino por la música.
Me perdono a mi mismo por permtir y aceptar el preocuparme y cuidarme de la tendinitis con el miedo como punto de partida.
Me perdono a mi mismo por permitir y aceptar el no asistirme a mi mismo cuando tengo una dolencia o enfermedad, usando el respiro de vida para entrar en honestidad conmigo mismo.
Me perdono a mi mismo por permitir y aceptar la culpa por no usar el respiro de vida, ya que eso lo pienso en deshonestidad, cuando en realidad solo debo respirar y seguir con mi camino a la vida.
Me perdono a mi mismo por permitir y aceptar el miedo a no ser honesto conmigo mismo.
Me perdono a mi mismo por permitir y aceptar el hecho de postergar mi cuidado físico y anteponer mi trabajo y elementos ligados al dinero antes que mi salud.
Me perdono a mi mismo por permitir y aceptar la música como un propósito inamovible en mi vida.
Me perdono a mi mismo por permitir y aceptar la música como la única manera de expresión que tengo.
Me perdono a mi mismo por permitir y aceptar el miedo a no estudiar música.
Me perdono a mi mismo por permitir y aceptar la tendinitis como un estado físico "maligno" entrando en polaridad conmigo mismo, cuando en realidad la tendinitis es un indicador que me asiste en mi proceso.
Me perdono a mi mismo por permitir y aceptar el miedo a no poder tocar batería a raíz de una tendinitis.
Me perdono a mi mismo por permitir y aceptar el miedo a no poder tocar piano y teclados a raíz de una tendinitis.
Me perdono a mi mismo por permitir y aceptar el hecho de que solo la medicina podría curar mi tendinitis, cuando en realidad yo debo apoyar a mi cuerpo desde un principio, y no solo esperar a que las cosas mejoren solo usando dinero para ello.
Me perdono a mi mismo por permitir y aceptar el miedo a no mejorar de una tendinitis.
Me perdono a mi mismo por permitir y aceptar el backchat durante el tiempo más grave de la tendinitis, culpándome y hundiéndome más y más en mi mente = una experiencia que no es real, por estar dentro de mi mente y no como quien yo soy.
Me perdono a mi mismo por permitir y aceptar descuidarme de la tendintis, anteponiendo tambien cosas como el computador y los video juegos.
Me perdono a mi mismo por permitir y aceptar la culpa por jugar video juegos mientras tengo tendintis.
Me perdono a mi mismo por permitir y aceptar la deshonestidad conmigo mismo al pensar que tengo "mala suerte" y que "no merezco lo que me está pasando porque tengo buenas intenciones y soy alguien bueno y enfocado".
Me perdono a mi mismo por permitir y aceptarme como una polaridad, en donde yo soy bueno, y lo malo que me pasa no es algo que yo deba vivir y experimentar porque no lo merezco, dejando de lado a todos los demás seres en este mundo.
Me perdono a mi mismo por permitir y aceptar la rabia que siento por tener tendinitis.
Me perdono a mi mismo por permitir y aceptar la rabia como algo real, generando conflictos mentales dentro de mi, sin darme cuenta de que no soy yo quien "sufre".
Me perdono a mi mismo por permitir y aceptar la rabia, frustración y ansiedad, asociadas al querer tocar batería y no estar "habilitado" porque tengo tendinitis.
Me perdono a mi mismo por permitir y aceptar el hecho de sentirme culpable por no precalentar antes de iniciar un ensayo y estudio de batería , cuando en realidad sé que debo hacerlo ya que tocar batería no es un movimiento natural del cuerpo físico.
Me perdono a mi mismo por permitir y aceptar la desmotivación como algo real, que no puedo controlar y que no depende de mi para lograr cosas en la vida, siendo que en realidad la motivación ya está dentro de mi, como yo mismo.
Me perdono a mi mismo por permitir y aceptar la desmotivación como excusa para no realizar mis actividades diarias.
Me perdono a mi mismo por permitir y aceptar el hecho de ligar la tendinitis con la desmotivación, generando movimientos energéticos en mi pecho y cabeza.
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